Ubicación perfecta en medio del pueblo. El Scot fue como un faro en la noche, brillando con su estilo contemporáneo que contrastaba con el encanto local de la ciudad costera.

Desayuno limitado.

Mi experiencia en The Scot en Oban durante mi viaje de negocios fue bastante satisfactoria. Lo que más me gustó del hotel fue la variedad de opciones que ofrecían para los huéspedes en términos de entretenimiento. Había música para todos los gustos, desde Country, Pop, 50's, 60's, hasta deportes. Esto hizo que siempre hubiera algo interesante que escuchar y disfrutar durante mi estancia. Además, las instalaciones del hotel eran muy agradables y proporcionaban un espacio cómodo para relajarse y descansar después de un largo día de trabajo. Fue un verdadero placer poder desconectar y recargar energías en este ambiente tranquilo.

En cuanto a los aspectos negativos, hubo un pequeño inconveniente en una de las habitaciones.

El hotel tiene una ubicación muy conveniente, cerca del centro de la ciudad y del puerto de Oban. Las habitaciones son amplias y limpias, con baños reformados y cómodos servicios adicionales como cafeteras de cortesía y aparcamiento gratuito.

El hotel carece de restaurante y la señal de WiFi es débil, lo que puede dificultar la conexión en algunas áreas del hotel.

Pasé aquí 3 noches y quedé impresionado por este hotel céntrico. La habitación era tranquila y muy espaciosa, con ventanas que se abren y con un precioso y moderno baño. El desayuno era delicioso y bueno y había un montón de comida, todo estaba bien presentado. Una ubicación realmente encantadora y estupenda justo al lado del centro de la ciudad, de del muelle y también de todos los lugares de interés; un registro rápido. Cené y disfruté de unas bebidas en el cercano Cuan Mor.

Mi director eligió el Scot en Oban para mi viaje de negocios y no me decepcionó. Lo que más me gustó fue la amplia selección de música disponible para los huéspedes. Desde música country hasta pop, pasando por los años 50 y 60, había algo para todos los gustos. me impresionó la variedad de temas, como deporte, salud mental y música cristiana. Esta diversidad hizo que mi estancia fuera aún más agradable y entretenida.

Durante mi estancia, noté que una de las habitaciones debía haber sido barnizada recientemente, ya que tenía un olor fuerte.

Me encantó mi estancia en este hotel. El valor que obtuve por mi dinero fue excelente, ya que la habitación era amplia y estaba impecablemente limpia. Además, la ubicación era perfecta, cerca del puerto y del centro de la ciudad. El personal fue muy amable y atento, especialmente Sofía, una camarera española en el restaurante, que nos brindó un servicio excepcional.

La oferta de desayunos podría haber sido mejor, aunque no tengo ninguna queja en particular.

Una ubicación de primera y muy cómoda, diría que me ha gustado mogollón el hotel.

El hotel era moderno y magnífico gracias a su personal trabajador. La habitación era bien equipada y bellamente decorada y lo que es más - tenía incluido una ducha y un secador de pelo. El desayuno tenía un montón de comida buenísima, era muy bueno. He tenido una estancia agradable y seguro que volveré.

El desayuno es bueno, y el lugar estaba siempre muy limpio. La cama era realmente encantadora, el baño grande y había un secador de pelo y una plancha con una tabla de planchar en la habitación. El restaurante era agradable, con un servicio excelente, tenía una comida bien presentada. Una ubicación céntrica, a una distancia media de Purdie's of Oban. En una zona preciosa...

Las habitaciones del hotel eran lo suficientemente espaciosas y de buen tamaño, con un baño y un dormitorio. La ubicación era bonita y perfecta - a poca distancia de todos los lugares a los que queríamos ir: )

Ubicación céntrica y conveniente. Desayuno abundante y delicioso.- Conserje amable y servicial.- Estudio limpio y bien equipado.- Buena calefacción en el hotel.- Aparcamiento gratuito cerca del edificio.- Personal simpático y atento.- Camarera española muy amable.

No tiene ningún problema.

El hotel está bien situado en Oban y esta cerca de todo. La atención es correcta , la limpieza está bien, y el desayuno está bien.

Tiene dos cosas que pueden ser un problema como la ausencia de ascensor, también es cierto que solo tiene dos plantas,pero para algunas personas puede ser un impedimento. Otra cosa que es un problema si eres de los que se despiertan al primer sonido es que se escucha el tráfico de la calle y por las noches se escuchan las pisadas de los inquilinos del piso superior, en ocasiones parecia que eran en tu propia habitación. De los desayunos sólo decir que no tienen cacao para los que no podemos tomar café o té.

Muy limpio y localización ... Desayuno muy bien mucha variedad

Para estar catalogado como hotel no tiene ascensor

Nuestra estancia en el Scot fue estupenda. La habitación era amplia y cómoda, a pesar de que necesitaba alguna pequeña reparación. El desayuno fue aceptable, con opciones para elegir. Aprecié especialmente la amabilidad de Sofía, una camarera española que trabaja en el restaurante del hotel. La ubicación también era conveniente. En general, recomendaría este hotel.

Hotel bien situado en la ciudad de Oban. Habitación cómoda y limpia, de mejor aspecto que la entrada y recepción del hotel. El personal es bastante amable. Restaurante en el mismo hotel. Desayuno escocés que preparan al momento y desayuno normal (este último no muy variado).

No sabemos si la calefacción funcionaba o no, aunque por la fecha en que estuvimos no hacía demasiado frío. Tienen parking para clientes, pero tb para los clientes del restaurante del hotel y, al ser pequeño, nosotros no tuvimos sitio.

¡Guau! ¡Nuestra estancia fue alucinante! Los estudios del hotel eran increíbles, con dos dormitorios, cocina totalmente equipada y todo estaba superlimpio. Los amenities eran geniales y la calefacción funcionaba perfectamente. La ubicación en el centro era perfecta y el parking incluido era súperconveniente. El desayuno era abundante y delicioso, y el personal, especialmente el conserje Atila y la camarera Sofía, fueron súperamables y serviciales. ¡No podríamos haber pedido más!